OBLIGACIONES FAMILIARES
. . . un desarrollo espiritual que no incluya . . . obligaciones con la familia no puede ser tan perfecto.
ALCOHÓLICOS ANÓNIMOS, p. 119
Puede que esté haciendo progresos en el programa – aplicándolo en las reuniones, en el trabajo y en las actividades de servicio – y mientras tanto las cosas se estén
desbaratando en casa. Espero que mis seres queridos lo entiendan, pero no pueden. Espero que ellos vean y aprecien mi progreso, pero no lo hacen – a menos que yo se lo haga ver.
¿Ignoro sus necesidades y deseos de tener mi atención y mi interés?.
¿Soy irritable y aburrido cuando estoy con ellos?
¿Son mis “reparaciones” sólo un “lo siento” mascullando, o tienen la forma de paciencia y tolerancia?
¿Les sermoneo tratando de reformarlos o “arreglarlos”?
¿He hecho una verdadera limpieza de casa con ellos?.
“La vida espiritual no es una teoría. Tenemos que practicarla”.
(Alcohólicos Anónimos, p. 77).
