Pere Aznar es un cómico que lleva algunos años haciendo monólogos y colaborando en televisión y radio. Seguramente mucha gente le conocerá porque ha trabajado con Andreu Buenafuente.
Le conocí por su libro “Beber”, lo tenían en la biblioteca de mi barrio y esa portada roja llamó mi atención, si encima el título era tan rotundo como “Beber” pues tengo que leer la sipnosis, deformación alcohólica puede ser la palabra.
Ojeando las primeras páginas veo de que va el tema, otro más al club. Con la diferencia en este caso de que el autor es una persona conocida y sus opiniones y reflexiones pueden tener mayor repercusión. Pues nada, que lo cojo y a casa a leerlo, seguro que aprendo algo nuevo.
De entrada me llama la atención el momento en que se encuentra el escritor, viene a decir algo así como “claro que quiero beber, tengo ganas continuamente “. uhmmm, lagarto, lagarto. Por mi experiencia este es el peor estadio en que se puede estar, al menos para mi.
Estar en abstinencia es lo más importante, de entrada. Es genial, pero es solo la primera parte, mientras existe ese deseo tan potente, el riego de recaída es grande, siempre desde mi experiencia.
Espero que desde que escribió el libro a esta parte eso haya cambiado.
Por lo demas, el libro es entretenido cuenta sus primeros contactos con el alcohol, me suena … Me doy cuenta de que al final con los matices de cada persona el camino suele ser muy parecido.
El alcohol es traoicionero, en un principio te lo da todo para mas tarde y sin prisa irte arrebatando hasta lo que crees que no teniás. Esa es la trampa de las adicciones.
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