la última copa, el libro
La ultima copa es un libro del alemán Daniel Scheiber quien como tantos otros de nosotros un día tuvo que dejar de beber y para siempre.
Y de esto trata este libro, Nos cuenta su vida como alcoholico y como abstemio, apoyado continuamente con datos oficiales, basados sobre todo en Alemania pero extrapolables a la mayoria de los países de su entorno y cultura.
Es un libro muy fácil de leer y muy ameno, en sus menos de 200 páginas habla sobre la ceguera que sufrimos los alcohólicos en ese largo periodo de tiempo en que somos incapaces de recocer nuestra enfermedad y vamos jurando y perjurando que tampoco bebemos tanto y que además lo podemos dejar cuando queramos, cosa que en nuestro interior mas profundo sabemos que no pasará.
verguenza alcohólica
Habla de la perdida de la memoria (como también hacía Sarah Hepola en su libro “lagunas”), de la vergüenza del día siguiente, de no querer mirar el móvil después de un ciego para no saber ante quien probablemente tenga que disculparse aunque ni siquiera sepa de que, pero en su interior también sabe que es mas que probable que la liase.
Es un libro que me ha gustado bastante, habla en primera persona de los miedos a no saber que hacer con su vida una vez el alcohol desaparece para después darse cuenta de que es lo mejor que pudo haber hecho.
Habla de alcohólicos anónimos como un grupo de apoyo imprescindible en su recuperación, de como en un principio no se plantea la ayuda de nadie para salir del pozo en que se encuentra para mas adelante darse cuenta de que no es fácil salir solo del alcohol y que hay sitios donde te puedes sentir arropado sin ser juzgado y donde puedes hablar de tus miedos o tus esperanzas y saber que no eres el único y por desgracia tampoco el último que tendrá que beberse ese trago y esta vez no podrá contener una gota de alcohol.
identificarse con un enfermo alcohólico
Como siempre con este tipo de libros, uno no puede mas que sentirse identificado con mas del 80% de las cosas que narra el protagonista, mas alla de edad, sexo o religión.
Es muy fácil entender al escritor e inevitable que se agolpen sentimientos en el lector que haya pasado por lo mismo.
Hay alguna idea en la que hace hincapié y que nos pasa a la mayoría de los que sufrimos esta enfermedad, pensar que todo el mundo bebe.
Si vas un bar solo ves gente que consume alcohol, por la calle gente bebiendo en parques o terrazas, si vas al super sin saber como terminas en el pasillo de las bebidas alcohólicas, en la televisión solo ves anuncios que te muestran lo guay que serías montado en un velero rodeado de chicos y chicas guapas y con una copa en la mano.
no todo el mundo bebe
A esto yo le llamo el síndrome de la mujer embarazada, seguro que lo conoces, consiste en que cuando una pareja decide tener un niño, no paran de ver chicas embarazas y este efecto se acentúa si por algún motivo le esta costando mas de la cuenta quedarse embarazada.
“Vale para todos, pero sobre todo para los que bebemos en exceso, cuando el consumo de alcohol se convierte en algo habitual, recurrimos al autoengaño y la ocultación para lidiar con la desdicha que conlleva esta adicción”
Habla en un aparte del libro también de esos estudios que hay en los cuales se dice que es posible volver a beber con moderación, sobre esto he visto incluso alguna clínica que se anuncia prometiendo enseñar a beber a quien siga su programa.
Como dice el autor, de la gente que probó estos experimentos no se conoce a uno solo que no volviese a beber en exceso.
Es muy común para cualquiera de nosotros acudir a una fiesta o reunión donde hay alcohol y hay alguna persona que insiste en hacerte beber a pesar de haberte negado ya en varias ocasiones.
situaciones de riesgo
Segun Daniel, esto se debe a la propia vergüenza de quien bebe en exceso, para poder enmascarar su imposibilidad de beber, lo que hace es buscar cómplices.
Esto es algo que a mi me ha pasado en mi etapa de mayor consumo.
Sencillamente la gente que no bebía no me gustaba, no era gente con la que estuviese cómodo, podía saludarlos y estas con ellos unos minutos pero pasado este tiempo o me iba a beber solo o me juntaba con los que veía que mas bebían.
Y es que es cierto eso de los alcohólicos tenemos un sexto sentido para poder localizar e identificar a enfermos como nosotros.
“La sobriedad es un estado que se renueva cada día. Uno esta sobrio hoy, luego el dia siguiente y luego al otro, pero siempre día a día. Just for today que dicen los americanos».
Da ademas en el libro y esto me parece lo menos interesante, nombres y ejemplos de gente mas o menos famosa que se han reconocido alcoholicos a lo largo del tiempo.
Un punto de vista que si me a parecido interesante y del que se habla en mas de una ocasión es esa falsa creencia de que el alcohol al igual que otro tipo de drogas te pueden hacer mas creativo.
alcohol y creatividad
No voy a negar que en algún momento al estar bajo los efectos del alcohol o cualquier otra sustancia pueda hacerte algo mas creativo pero con el tiempo te darás cuenta de la esclavitud que supone el tener que tomar alguna sustancia para desarrollar cualquier actividad ya sea creativa o de cualquier otro tipo.
Es un miedo muy extendido entre los que tenemos un grado de dependencia del alcohol alto pensar en que cuando dejemos de beber seremos incapaces de desarrollar tal o cual actividad.
Es un miedo recurrente que cuando se lleva un tiempo en abstinencia no solo desaparece sino que ademas nos volvemos mucho mas creativos y productivos en nuestras tareas cotidianas.
Como veis no puedo hablar de este tipo de libro sin mezclarlo con mis ideas y pensamientos personales, también este tipo de escritos me lo hacen pasar mal en algunos momento ya que aunque el escritor este escribiendo alguna experiencia personal en mi cabeza aparecen recuerdos que llevaba algún tiempo enterrados y que de repente vuelven a mi.
identificarse con el autor
Esto último no se si es bueno o malo, en cualquier caso tengo que aprender de lo que fui para poder proyectarme en quien quisiera ser.
“La dependencia es, para mantenernos dentro del campo semantico de la neurobiologia, un intento de recortar el recorrido sináptico, de recibir mas de lo que uno necesita, proyectando nuestros deseos en una sustancia: el alcohol. Cuando se confiere a una sustancia tal valor, nos resulta difícil satisfacernuestras necesidades de otro modo.
Y eso es justo lo que uno puede hacer cuando esta sobrio. Como adicto ya no podrás restituir tu cerebro al estado de inocencia previo a la adicción. Pero si que puedes aprender a llenar tu vida de significado y de cosas placenteras y añadir al coro de voces de tu mente otras voces mas suaves y tiernas.»
